martes, junio 10, 2008

Gobierno y sindicatos, radicalmente en contra de la ampliación de la jornada de trabajo

El gremio de médicos, que amenaza con una huelga a nivel europeo, sería uno de los más perjudicados | La nueva directiva acordada el martes debe ser ahora aprobada por el Parlamento Europeo

ADN.es / Agencias

El ministro de Trabajo e Inmigración español, Celestino Corbacho

EFE GINEBRA (SUIZA)

El acuerdo alcanzado por los ministros de Trabajo de la Unión Europea durante la pasada madrugada para ampliar la jornada laboral ha puesto en pie de guerra a media España. Agentes sociales y Gobierno han comenzado ya a trabajar para que la directiva propuesta no sea aprobada por el Parlamento Europeo, un trámite obligatorio en este caso y que tendrá lugar antes del final de 2008.

La discutida normativa, aprobada en Luxemburgo tras cuatro años de negociaciones por mayoría cualificada -además de España, otros cinco países se negaron a aceptar el acuerdo- tiene su punto más polémico en la ampliación del límite máximo de horas de trabajo por semana -el opt-out promovido por Inglaterra-. Así, el límite se amplía de las actuales 48 horas semanales vigentes en España a las 60 o incluso a las 65 en el caso de algunos sectores, como los médicos.

Este sector, que amenaza con comenzar un paro simultáneo en toda Europa -que han denominado "eurohuelga"-, es uno de los más perjudicados. Así lo aseguraron el fin de semana pasado en Toledo el presidente y vicepresidente, Claude Wetzel y Carlos Amaya, de la Federación Europea de Médicos Asalariados (FEMS). Su objetivo "más inmediato" es conseguir que el Parlamento Europeo bloquee la reforma.

¿Guardias médicas interminables?

Según la misma, dentro del nuevo máximo de trabajo semanal -65 horas- no se incluyen las guardias de presencia física en los centros. Así, si el médico tiene una guardia de 12 horas y sólo atiende a pacientes durante ocho, aunque tenga que permanecer en el centro de trabajo por si surge la necesidad de su actuación, tan sólo las ocho horas se contabilizarán como horas trabajadas a pesar de haberse visto obligado a permanecer 12 en el hospital o centro de salud.

"La jornada en hospitales y centros de salud se ampliará hasta horarios propios del siglo XIX", señala la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) en un comunicado. Para el colectivo, el problema consiste en la "escasez de profesionales" y "el peso creciente de la sanidad pública en los presupuestos", algo que no creen que las condiciones impulsadas por la directiva vayan a solucionar.

Los sindicatos, en contra

Los agentes sociales también se han mostrado completamente en contra de la normativa. Así, el secretario de Acción Sindical Internacional de Comisiones Obreras, Javier Doz, ha calificado la directiva como el "mayor ataque al derecho laboral europeo desde la creación de la Unión Europea".

Doz considera "intolerable" convertir la jornada de trabajo, a la que definió como elemento esencial de la negociación colectiva y de la legislación laboral, en una cuestión de relación individual entre el empresario y el trabajador. Por ello, Doz manifestó su intención de presionar junto a la Confederación Europea de Sindicatos (CES) ante el Parlamento Europeo para lograr que se rechace la directiva, al tiempo que CCOO luchará para mantener en España la legislación vigente en materia de derecho laboral.

Por su parte, Cándido Méndez, secretario general de UGT, también ha expresado su preocupación por la decisión de los ministros de Trabajo de la UE y ha advertido de que "así podemos abocar a una situación de confrontación muy seria". El dirigente sindical ha señalado que "así no se construye Europa" durante su intervención en Bilbao en la celebración del 30 aniversario del congreso constituyente de UGT de Euskadi como unión territorial.

A su juicio, las instituciones europeas responden de forma "equivocada" a los problemas económicos y laborales pretendiendo "extender a toda Europa la opción de algunos países, particularmente de Reino Unido, de pasar de la jornada de 48 horas a 65 horas" con el argumento, de "un cinismo descomunal", de que "esto garantiza la libre elección de jornada del trabajador", según ha criticado.

Gobierno y PSOE siguen buscando aliados

El Ejecutivo español, que ya encabezó durante la reunión de ministros la oposición a la aprobación de la directiva, no consiguió bloquear el acuerdo debido a que Francia e Italia apoyaron finalmente la iniciativa. Sólo España, Bélgica, Grecia, Chipre y Hungría optaron por abstenerse y adjuntar una declaración pidiendo a la Eurocámara que mejore la norma.

Por su parte, el PSOE ya ha iniciado contactos con el resto de partidos socialistas europeos para "formar un bloque contra la directiva" e intentar modificarla cuando sea tramitada en el Parlamento Europeo, informó la Ejecutiva Federal del partido en un comunicado.

Según fuentes socialistas, los contactos los está liderando el eurodiputado Alejandro Cercas, ponente de la Directiva sobre la ordenación del tiempo de trabajo en la comisión de Empleo de la Eurocámara. Cercas se encuentra este martes en Nápoles en una reunión del grupo parlamentario de los socialistas europeos.

Entre los socialistas europeos están, no obstante, los eurodiputados del Partido Laborista británico, cuyo líder, el primer ministro Gordon Brown, es el principal impulsor de la directiva, y concretamente de la posibilidad de ampliar la jornada laboral mediante acuerdos individuales entre empresario y trabajador.